viernes, 12 de septiembre de 2008

17 de Septiembre de 2005 (Prosa)

    Tanto tiempo deseándolo, tanto tiempo esperándote, tenia que tener su recompensa. ¡Cuando te vi!, no puede contener las lágrimas, aun hoy cuando recuerdo aquel momento, la alegría y la emoción vuelven a brotar por mis ojos.
    Eras preciosa, pequeñita, me miraste fijamente, y me permitieron abrazarte, agarraste mi dedo índice con tus manos, y al oído, suavemente, te lo dije por primera vez, -¡Te quiero! ¡Mi vida!-, desde entonces hasta ahora, mil veces lo harás escuchado, y cada vez que en mi boca suenan esas palabras, las ha pronunciado directamente mi corazón.
    Tormentas han golpeado mis días, que tu, por suerte, no podrás recordar, y cada una de ellas a escampado cuando, de tus labios salida un Aitatxo, ¡Maite zaitut! o un ¡Te quiero Papa!.
    Tres años han pasado ya, desde que llegaste a este mundo, has traído la alegría a un corazón falto de ella, con ella han venido risas, mimos, juegos, y miles de momentos que jamás nadie podría cambiar por dinero.
    Cuando tus ojos me miran, me siento el centro del universo. Cuando lloran siento que me muero. Tu mirada, inocente como tú, franca y feliz como debe de ser toda niñez, me reconforta hasta el punto de no necesitar nada más en el mundo.
    Tus manos, cuando cogen las mías, me transmiten toda la energía que necesito para seguir viviendo, las fuerzas necesarias para afrontar cada nuevo reto que la vida, no siempre justa (lo comprobarás con los años), nos presenta.
    Tu risa, contagiosa hasta puntos inimaginables, y tu sonrisa picara, el mejor entretenimiento para una mente cansada, la mejor terapia contra el estrés. La mejor adrenalina para este corazón cansado.
    Alaitz, eres todo cuanto tengo, y sin embargo por ello me considero rico, y... ¿por que no?... Millonario, millonario en alegrías, satisfacciones, orgullo, y tantas cosas... que no encuentro palabras para definirlas. Espero que si algún día lees esto, juzgues con cariño todo lo que digo.
 
¡Maite zaitut bihotza!
¡Zorionak Maitea!

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gasteiz

Cada rincón un recuerdo Qué me gustaría contarte, A cada paso una pieza Del puzzle que quiero mostrarte. Ojalá estuvieras aquí Ojalá pu...